La tinción de Giemsa, ideada por el alemán Gustav Giemsa es un método diferencial de tinción, que se utiliza para distinguir los distintos componentes celulares, atendiendo a la distinta afinidad hacia unos colorantes u otros. La tinción de Giemsa permite la diferenciación de las distintas células sanguíneas, colorea y revela eritrocitos, basófilos, eosinófilos, polimorfonucleares, linfocitos, plaquetas y la cromatina de los núcleos.
Estos poliorganismos adquieren una coloración diferencial y se ven dentro del citoplasma de la célula huésped. La técnica de Giemsa está formada por varios colorantes: los tintes neutros utilizados combinan el azul de metileno, Azure A y Azure B como tintes básicos, y la eosina como tinte ácido, lo que da una amplia gama de colores. El azul de metileno y el Azure son colorantes metacromático, de ahí que muchas estructuras se tiñan de púrpura y no de azul. El pH de la solución de coloración es crítico y se debe ajustar idealmente según diversos fijadores. La gama del pH debe estar entre 6,4 y 6,9.
Esta técnica presenta multitud de variantes, pero las diferencias se basan en el empleo o no de diferenciador, el tiempo de permanencia del colorante, el uso de alcoholes en diferente graduación, etc.
La técnica consiste en:
- Previamente desparafinar e hidratar los cortes histológicos realizando los pasajes correspondientes por Xileno o Pathoclear Plus y los alcoholes de graduación descendete como se realiza habitualmente en las técnicas de coloración de coloración de Hematoxilina-Eosina.
- Lavar con agua destilada a fin de preservar la calidad y el rendimiento del colorante en uso.
- Cubrir con una solución giemsa durante 20 minutos.
- Lavar con agua destilada.
- Diferenciar con solución de Ácido Acético.
- Lavar con agua destilada.
- Realizar dos pasajes por alcohol 96°.
- Realizar dos pasajes por alcohol 100°.
- Finalizar con un pasaje por Pathoclear Plus, Xileno o BioClear.
- Montar con Bálsamo de Canadá sintético (a fin de aclarar).
- Observar en microscopio óptico.